Es paradójico pensar que el punto de partida de un ser humano puede ser, en pleno siglo XXI, razón de muerte para otro. Sierra Leona ocupa el primer lugar en el ranking de mortalidad materna; una de cada ocho mujeres muere durante el periodo de gestación. La salud, en ciertas partes del mundo, sigue siendo un lujo más que un derecho.
Yerie Marah, es una víctima más. Con tan sólo 22 años, ha pagado las consecuencias de la desigualdad en la distribución de la riqueza; menos de la mitad de las embarazadas recibe atención sanitaria especializada. Sierra Leona, después de Papua Nueva Guinea , es el país más pobre del mundo.
Yerie Marah, es una víctima más. Con tan sólo 22 años, ha pagado las consecuencias de la desigualdad en la distribución de la riqueza; menos de la mitad de las embarazadas recibe atención sanitaria especializada. Sierra Leona, después de Papua Nueva Guinea , es el país más pobre del mundo.
El 70% de la población vive con menos de un dolar al día. Si tenemos en cuenta que los gastos del parto pueden elevarse hasta los 350 dólares, no es del todo extraño que la mayoría de mujeres encinta, desistan de la idea de recibir atención médica.
Miles mueren desangradas tras el parto, como Yerie. La mayoría lo hace en su casa. Otras, fallecen de camino al hospital; en el coche o incluso a pie. La maternidad, se ha convertido en Sierra Leona en una de las principales causas de muerte.
Esteban Beltrán, Director Amnistía Internacional Sección Española, pide nuestra ayuda para que "juntos podamos exigir el cumplimiento del derecho a la salud en todo el mundo".Una firma, puede cambiar el destino de miles de africanas.
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