El País recoge en sus páginas la acusación hecha efectiva por la ONU. Según la Organización Internacional dos ONG españolas vinculadas a organismos religiosos han financiado la guerra que azota el Congo. Estas organizaciones se valían de fondos procedentes de subvenciones públicas para apoyar al Frente Democrático por la Liberación de Ruanda (FDLR), milicia local que sostiene la guerra y que además ha sido acusada de crímenes contra la humanidad como reclutamiento de niños-soldado, violaciones en masa y asesinatos contra la población civil.
Las ONG´s acusadas, la mallorquna Fundació L´Olivar y la catalana Inshuti tachan estas acusaciones de "ridículas" y acusan a la ONU de tomar represalias contra ellos para "tapar los fracasos de la ONU en la zona de las últimas décadas".
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